Pedalear desde la playa de Boa Viagem hasta el mercado de São José es una inmersión en la historia y en paisajes increíbles
El ciclismo es una de las formas más agradables de conocer un destino. Levantarse temprano, subirse a una bicicleta y pedalear por diversos puntos de Recife, disfrutando del bello paisaje, de la brisa marina y aprendiendo todo sobre la historia de la ciudad, es una de las opciones imperdibles para los turistas que visitan la capital de Pernambuco.
Playas urbanas y pueblos pesqueros
Si empieza a pedalear a primera hora de la mañana por el sur de la ciudad, podrá disfrutar de la tranquilidad de las famosas playas urbanas de Boa Viagem, Pina y Brasília Teimosa. En este recorrido, visitará un pueblo de pescadores que aún conserva características culturales que han pasado de generación en generación.
Saliendo de allí, el siguiente destino es un paseo en bicicleta por los famosos arrecifes que dan nombre a la ciudad y ofrecen una de las vistas más hermosas de Recife. Es un buen momento para contemplar la belleza natural de la ciudad y hacer muchas fotos.
Y no acaba aquí. El Parque de Esculturas Francisco Brennand se inauguró para conmemorar los 500 años del descubrimiento de Brasil y es una visita obligada en este recorrido. Le encantará este museo de arte al aire libre con 90 esculturas de uno de los principales artistas de Pernambuco. La principal obra del parque es la Torre de Cristal, de 32 metros de altura, realizada en arcilla y bronce e inspirada en una flor. Junto a la torre hay cinco sirenas, cada una representando un siglo desde el descubrimiento de nuestro país.
Recife antiguo
A bordo de un pequeño barco, cruzará el río hasta Recife Antigo, el centro de la ciudad. En esta zona, podrá visitar la plaza Marco Zero, el Centro de Artesanía de Pernambuco, la famosa Calle de Bom Jesus, la embajada de los Muñecos Gigantes de Olinda, el Cais do Sertão, el Paço da Alfândega, el Museo de la Ciudad de Recife y mucho más.
En bicicleta, podrá perderse por las calles de los barrios históricos, pedalear por los puentes de Recife y disfrutar de las orillas del río Capibaribe. Como colofón a este recorrido, nada mejor que una parada en el Mercado de São José, el mercadillo más emblemático de la ciudad. Es un buen lugar para comprar algún recuerdo de su viaje y llevárselo a casa.
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El recorrido completo dura unas 3 horas y recorrerá una media de 10 km desde la playa de Boa Viagem hasta el mercado de São José. El guía se encarga de las paradas estratégicas y de contarle mucha historia y curiosidades sobre Recife.
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